jueves, 31 de diciembre de 2015

RESEÑA POR CAPÍTULOS ["Seducción" - 'Mi Hombre' #1] Capítulo 1

No sé si os acordáis, pero allá por enero/febrero hice una encuesta para celebrar el tercer aniversario del blog. Se suponía que iba a hacer una reseña por capítulos del libro mierder que votaseis, pero al final la cosa se salió de madre y acabamos haciendo una lectura conjunta de After (otra mierda), relegando la fantástica trilogía de Mi hombre al olvido. 

Por si se os ha olvidado de qué iba el libro, os adjunto la sinopsis:
Tres... Sé que él no me conviene.
Dos... Mi instinto me grita que salga corriendo.
Uno... Pero si sigue mirándome así...
¿Qué haré cuando llegue a cero?
 
Indomable, controlador, autoritario, implacable, dulce, provocador...
Es peligroso.
Es enigmático.
Es absolutamente adictivo.
Es mi hombre.
¿No se os caen las bragas de la ilusión? Porque a mí no. Además, esa sinopsis tiene cierto tufo a Crepúsculo (incluso la portada, con el típico fondo negro). Me estoy yendo por las ramas. Aquí no hemos venido a analizar su exterior, sino lo que hay en su interior

En este primer capítulo se nos presenta a la boba de Ava O'Shea (madre mía con el nombre: Abba Oseatíaquéfuerte; ¿no había más apellidos en el mundo más pijos?), nuestra insufrible protagonista

Nada más empezar a leer un personaje pone los ojos en blanco, señal inequívoca de que estamos leyendo una novela de calidad en la que se usará mucho ese gesto para expresar frustraciones (si jugásemos a tomar un chupito cada vez que alguien pone los ojos en blanco en esta novela, pasaría como con After y acabaríamos todos ingresados en el hospital). La autora nos demuestra también su maestría a la hora de describir colores con oraciones tan elaboradas como ésta:
"El césped está más verde que el verde."
Si no estáis pensando en darle un Nobel a la de YA a Jodi Ellen Malpas es que no entendéis de literatura. Lorca estaría orgulloso de ella. 

Aunque no todo van a ser letras, Jodi Ellen Malpas (JEM a partir de ahora, que me da pereza escribir un nombre tan largo) también maneja el mundo de los números, haciendo que su fabulosa Ava de un giro de 360º metafórico en su vida, lo que provoca un cambio radical nada más empezar la novela.
Pero dejemos un momento de lado las alabanzas a la prosa de JEM (♫ Jem! Jem is excitement. Uuuh! Jem! Jem is adventure. Uuuh! Glamour and glitter. Fashion and fame. JEM! ) y analicemos la trama.

Como ya he dicho, nuestra protagonista se llama Ava Oseatíaquéfuerte O'Shea. Es una de esas jóvenes que se ha hecho a sí misma: no ha estudiado porque nació con un don para un trabajo fashion (en este caso, decoración de interiores), lo cual le permitió entrar directamente a trabajar de lo que ella quería y se convirtió en la mejor de su empresa sin esfuerzo pero con trabajo duro (¿?)
Pa' qué estudiar cuando puedes nacer con una flor en el culo, ¿verdad?
Además, pierdes la juventud entre libros y flexos. ¿Y qué hombre te va a querer pálida y ojerosa?
Nuestra aventura comienza el día que Ava se levanta y se viste (y te cuenta toda la puta ropa que se pone encima, con sus colores y todo; me cago en el puto marrón tostado) para ir a trabajar y a reunirse con un nuevo cliente. Llega un poco tarde para demostrarnos que no se toma la vida demasiado en serio, que es alegre, divertida y un poco torpe, no como Sal, compañera de trabajo que es un desastre porque se le atasca la fotocopiadora (ella no, ella tiene montañas de mierda en su cuarto y llega tarde al trabajo y es encantadora). Cuando llega a La Mansión (la casa se llama así en un alarde de originalidad; Ava no se llama La Protagonista porque el editor le diría algo a JEM sobre dejar de emular Desayuno con diamantes), Ava conoce al primer personaje de color con el que nos topamos en todo el libro, un guardaespaldas, y a su futuro HOMBRE, que tiene una mansión pero parece ser que mayordomo no. 

La Mansión, más que un lugar de ensueño parece todo el barrio de Las Tres Mil Viviendas de Sevilla o las favelas de Rio de Janeiro. El sexto sentido de Ava no para de gritarle PELIGRO y ALARMA ANTIVIOLACIÓN una vez que está dentro (bueno, fuera de la casa también se lo grita por lo visto), pero ella se mete en la boca del lobo porque sino no habría libro del que rajar.
¡Y hasta aquí el primer capítulo!
IMPRESIONES: La protagonista me ha parecido tonta no, lo siguiente. Y lo peor es que la voy a sufrir durante toda la novela porque está narrada en primera persona del singular (Señor, mátame). Tiene una manía desesperante con describir TODO lo que hace e intentar parecer graciosa haciéndose la torpe (como nuestra amiga Anastasia Steel; si a ella le funcionó con el neandertal de Grey, ¿por qué a Ava no le va a funcionar con SU HOMBRE?)Creo que la odio. Creo que odio el libro y no he pasado del 1%.

miércoles, 30 de diciembre de 2015

BOOK TAG [2*] ¿Éste o éste? Personajes masculinos

Segunda vez que me nominan al book tag éste. Y si lo hago no es porque me emocione especialmente la lista de elecciones (ya veréis, ya), sino porque mi blog da pena de lo abandonado que lo tengo y quiero acabar el año por lo menos con cuarenta entradas publicadas (teniendo en cuenta que estamos a día 30 de diciembre, pues eso no va a pasar; pero, oye, soñar es gratis).

Al menos esta vez es diferente y, en vez de elegir libros, elijo personajes masculinos (cada uno más ahostiable que el anterior). Y no, esta vez no le he suplicado a nadie que me nomine, Liv Bennett lo ha hecho por iniciativa propia.

Reglas:

  1. Nombra al blog que te nominó. Hola, Mi rincón de libros y locuras.
  2. El personaje con el que empiezas es el personaje ganador de la persona que te nominó.*
  3. Según la lista de personajes nominados que te otorgaron, vas a ir escogiendo en orden si dejas el personaje que te traen o escoges uno nuevo y das una explicación del porqué.
  4. Una vez que tengas tu personaje ganador escoge siete personajes nominados y etiqueta a siete personas.
*Liv se pasó esto un poco por el forro de las bragas y puso su personaje ganador al final de la lista. Entenderéis porqué en cuanto empecéis a leer.


Guatemala versus Guatepeor...
Matadmeporfavor1 versus Matadmeporfavor2. Tanto monta, monta tanto, Isabel como Fernando. Ahí, empezando a lo grande con los dos grandes amores de mi vida: Christian Grey, abanderado del maltrato a la mujer como una nueva forma de sadomasoquismo, y Hardin Scott, psicópata adolescente. Esto es duro. Es como elegir si quiero morir ahogada o quemada. 
Grey es americano, presidente de una multinacional que hace magia para que no le falten los millones en el banco. Tiene traumas infantiles con su madre biológica que canaliza en forma de hostias como panes a toda mujer que "ama". Él  lo llama sadomaso, yo lo llamo ser un machista de los cojones. Este pack incluye que te controle las comidas, la regla, la respiración y que te implante un microchip como si fueses un perro cuando le des el sí quiero.

Hardin ("Jardín" para los amigos) es inglés, lo que ya de entrada le otorga como un millón de puntos y le hace ganar este debate. Es un genio al igual que Grey porque las editoriales se dan de hostias para que trabaje con ellas cuando aún está en segundo de carrera, y el dinero no le falta porque los decanos (como su padre) en EE.UU. son millonarios. También es un chico precavido y siempre lleva camisetas como para montar un ZARA en el maletero de su coche, cosa que cualquier madre adoraría (y encima te deja limpiarte los bajos con ellas). Obviaremos el tema Tessa y que sea un alcohólico con veinte tacos porque fijo que el chaval éste es amor cuando no está cerca de la retrasada de Theresa (JAJAJJAJJA, ¿a quién quiero engañar?)

Gana Hardin porque me divertí durante la lectura conjunta, y sin él y sus perlas machistas eso no habría sido posible.
El muchacho de la foto de Travis Maddox es un espontáneo (el que más me ha gustado de los que salían en Google Imágenes, vaya).
N
o me preguntéis el nombre porque no sé quién es.
No he tenido el enorme placer de leerme Maravilloso desastre pero, según la Wikipedia, Travis Maddox es el tipo de hombre al que metería en un calabozo, tiraría la llave por el váter y no tendría ningún tipo de remordimiento. Un muchacho que de día es un estudiante de Derecho ejemplar, y por las noches se parte la boca con quien se le tuerza ofrezca a la salida de un bar. Una joya de tío.

Supongo que la protagonista del libro será otra retrasada de la que se enamora porque "no es como las demás", pero en verdad es una mosquita muerta más que sólo quiere estudiar tranquila (fijo que Filología Inglesa) y cuyo libro favorito es Cumbres Borrascosas/ Orgullo y prejuicioJane Eyre/ Tess of D'Urbevilles /etc., con el que hará un paralelismo con su historia de amor, desvirtuando la novela original y convirtiendo un libro que denunciaba el trato a las mujeres en aquella época en una nueva Biblia machista con la que seguir manteniendo esa idea de amor romántico tan en boga hoy en día de "si me vigila a todas horas, lo que como, con quién voy, a quién llamo y lo que hago es que me ama" (¿qué celos ni qué control ni qué machismo ni qué náh de náh?).

Me sigo quedando con Hardin porque la trama de After es igual y me lo leí primero.
La foto de Beau me enamora. Luego os la pongo entera y os enamoráis conmigo.
¡Sí, sí, sí! ¡Beau Swan! (en mi cabeza, Bo Suan). No sabéis las ganas que tengo de leerme este libro y rajar. En epublibre ya han subido el libro (guiño, guiño). Ahora viene la gran pregunta: ¿cuándo hacemos la lectura conjunta? Pensé en Navidad, pero hay gente que tiene que viajar, otra tiene que estudiar... Y como pregunté por Facebook y nadie contestó, ahí quedó la cosa. Ahora, en serio, decidme si preferís después de Año Nuevo o nos esperamos a después de exámenes (como con After). ¡COMENTAD, insensat@s!*

En cuanto al combate... Creo que debería ganar Beau. Por esta foto:
Pero, claro, no me he leído aún el libro (aunque ya he leído reseñas que lo ponen bonico) y no me parece justo que gane Beau sólo por ser un engendro de Meyer. Así que seguimos con Hardin (total, ya he cumplido mi sueño: subir esa obra maestra del Potochó), que su foto me provoca menos pesadillas.

Jasedme el favóh de comentar sobre la lectura conjunta, coño!
¡Qué me aspen!
Creo que a estas alturas del tag he desarrollado cierto síndrome de Estocolmo y Hardin me parece mejor que ninguno. Aspen no es que tenga el mismo nivel de retraso social que Hardin, pero sí que es verdad que también es un personaje bastante machista. Rescatemos una de sus grandes perlas del primer libro de esta saga:
"No quiero caridad, América. Soy un hombre. Se supone que soy yo quien debe mantenerte."
Ole, ole y ole. Un aplauso para Aspen en toda la cara. En comparación con Hardin, dice y hace muchas menos burradas, eso no lo niego, aunque yo creo que es porque aparece cuatro veces contadas en el primer libro (si lo dejamos de co-protagonista, a lo mejor le enseña cuál es su lugar a América). Le he cogido demasiado cariño a Hardin y su litro y medio de tatuajes, así que lo vuelvo a proclamar ganador porque Aspen me cae mal y me parece un sieso (y porque La Selección no me gustó; con After al menos me eché unas risas). Además, Aspen no tiene un maletero mágico.
Iba a poner al nuevo actor que va a hacer de Jace, pero no salía costumizado.
Mmmmmmm, no soy fan de Cazadores de sombras (bueno, la de Los Orígenes sí me gusta, pero por el rollo steampunk victoriano, no porque me enamoren los protagonistas) y Jace no es santo de mi devoción. Es el típico que va de malote por la vida pero lleva un pequeño mártir en su interior, y que pereza los personajes masculinos así, en serio. Me quitan de la vida (Hardin también me quita de la vida, pero es que Tessa es gilipollas y necesita a alguien a su altura).

Ñeh, si, total, Hardin ya ha llegado hasta aquí. Lo dejaré llegar a la ronda final (en la que no tiene nada que hacer).
Tod@s sabemos cómo va a acabar esto.
Y hasta aquí, Hardin Scott. Tyrion Lannister es el amo y señor de este tag. Puede que no tenga un maletero mágico (porque básicamente no tiene coche), pero tiene este gif:
Tyrion Lannister = ¡Güinner!
Nominaría a alguien si no fuese porque me han quitado todas las opciones que yo pondría para fastidiar, y así no tiene gracia (en verdad hay más amigos de Hardin por ahí, pero no me he leído esas mierdas esos libros). El que quiera hacer el tag, que coja las fantásticas elecciones de Liv.

miércoles, 23 de diciembre de 2015

"Jane Eyre", de Charlotte Brontë

5 - Obra maestra
Jane Eyre es un libro que llevaba dos años cogiendo polvo en mi estantería (y ocupando sitio, porque encima es un libro gordete) hasta que este otoño me dio por leerlo. Ya lo había intentado hacía un par de años y lo abandoné porque me daba pereza mental leer un clásico (no me juzguéis), y más de la hermana de Emily Brontë, que a mí Cumbres borrascosas... Ñeh (y eso que me lo he leído tres veces, pero nada, no me entra).

El caso es que no tenía grandes expectativas en cuanto a la lectura (hace años me vi la adaptación de la BBC de 2006, pero me acordaba de cuatro cosas), y al final me he terminado enamorando del libro. En serio, me ha dado muy fuerte, me tocó la patata a unos niveles que no me esperaba.
Que he llegado a llorar con el puto libro, y lo peor, ¡de felicidad!
¡Qué a mí eso no me había pasado en la puta vida!
Yo no sé si es que me pilló en la semana de antes de que me viniese la regla y ese mes tocaba estar sensiblera (mi menstruación es como la lotería, nunca sabes qué te va a tocar cada mes: estar de mala hostia, llorar con perretes o morir de dolor hasta casi quedarte minusválida), o es que de verdad era para tanto el libro.

El caso es, Jane Eyre es un libro con una trama bastante conocida: muchacha pobre que se convierte en institutriz y se acaba enamorando del padre/tutor de la criatura. No es la primera vez que lo vemos (aunque tampoco sé si esta novela fue la precursora). Podríamos pensar que Jane es un poco Mary Sue, pero yo no lo creo.
Jane es un personaje fuerte, con un par de ovarios, práctica, rebelde, independiente y con temperamento. Lo malo es que la amaestran un poco durante su estancia en el colegio y pasa de partirle la cara a su primo a rezar el rosario todos los días (que pereza el tema religioso en la novela, en serio, pero es lo que tocaba por aquel entonces). Aún así, Jane tiene muy claro cómo funciona la vida, o al menos su vida, y no se sale de ahí por mucho que al señor Rochester a los demás les dé la gana. Ella es así, si te gusta bien y si no ahí está la puerta. Y yo la amo.

Y hablando del señor Rochester, la verdad es que a mí al principio no me caía demasiado bien. Su condición de noble le hacía ser un poco enterado de mierda y me entraban ganas de abofetearle con un guante. No entendía cómo Jane se acababa enamorando de él, pero el caso es que la pareja acaba funcionando. Es una de esas historias en que los personajes se enamoran casi sin darse cuenta, lo cual echaba mucho de menos en una novela (porque hoy en día si no es instalove, no es para siempre).
Sólo con eso, el libro ya tiene el cielo gana'o
(a lo mejor por eso me emocioné tanto).
Si hay un personaje al que he odiado con toda mi alma (más que a los primos y a la tía odiosa, que ya es decir), es a St. John (pero el segundo que aparece en la novela). ¡Qué imbécil, qué gilipollas, qué pedrá en la cabeza tiene! No podía con él (¿se me nota?) y me quemaba la sangre cómo anulaba a Jane y lo fanático religioso que era, cuando se notaba que la gloria de Dios le importaba una mierda y que era la gloria de su ego lo que movía su vida, el "mirad, todos que bueno soy".

Dejando al tonto de St. John de lado, repito que la novela me ha encantado y que me ha parecido muy feminista para la época en la que está escrita (y está escrita por una mujer, que en aquella época eso era harto complicado): su protagonista es una mujer fuerte que busca la educación y su independencia económica antes que un marido que la mantenga, como mandaba la tradición. No es una rebelde que va quemando corsés por ahí, pero cuestiona el papel de la mujer en la sociedad victoriana y el sistema de clases.

Así que, no me repito más: tenéis que leeros el libro (no entiendo porqué no es obligatorio leerlo en mi carrera y Cumbres borrascosas sí). Es un clásico que se merece tal título. Un diez como una catedral. Un turrón de Suchard. Una tarta de pionono. Un gofre con nata y chocolate (Dios, cómo se nota que llevo una semana a purés y sopas por culpa de la muela del juicio; todas las comparaciones de cosas de diez que se me vienen a la cabeza son comida).
¡Lo mejóh de lo mejóh!

domingo, 13 de diciembre de 2015

ABANDONO [!] Un disfraz para una dama. Mujeres que corren con los lobos

Pinchad en la imagen si no queréis perder los ojos leyendo.
Estos libros podría meterlos en la sección de lecturas veraniegas porque fue este verano cuando decidí abandonarlos, especialmente el de Mujeres que corren con los lobos, libro con el que llevo atascada dos putos años. Pero como soy una dejada, pues aquí estamos, a las puertas de la Navidad haciendo reseñas de hace cuatro meses (y las hago juntas porque soy una vaga y no me apetecía escribir dos entradas).

El primero, Un disfraz para una dama, me lo empecé a leer porque era verano, no me apetecía usar las neuronas y parecía entretenido. NO.
¿Por qué la gente sigue publicando novelas tan soberanamente malas? Me desespero.
Pa' empezar, la sinopsis te cuenta TODA la novela (yo la he acortado en la imagen por si os dais un golpe en la cabeza y queréis leeros el libro). En serio, ¿no hay una asignatura en Edición (o yo qué sé, ¡un tema!) que sea sobre hacer sinopsis en la que les expliquen que si tu sinopsis abarca todo el libro no es una sinopsis, es un resumen de toda la trama? ¿No les enseñan a cortar cuando ya te han desvelado media novela? En fin... Es algo con lo que las editoriales nunca nos harán felices porque fijo que es el departamento de marketing el que se encarga de eso.

La protagonista, cuyo nombre no recuerdo, ni siquiera me estaba cayendo bien cuando leía porque va de sobrada moral por la vida: decide escarmentar a su padre, que por lo visto prostituía a su madre y la maltrataba. Ésta, para evitar que su hija acabe igual, manda a su hija a vivir a Italia con una antigua actriz, que hoy en día sería como una Johny Depp (según la protagonista, es una maestra del disfraz), que le enseña todos sus trucos. Todo esto que os estoy contando cubre los primeros tres o cuatro capítulos (más el viaje de vuelta a Inglaterra, su "actuación" delante del padre y su "abandono"). Fijaos si me pareció mierder el libro, que no llegué pasar del 14%. Me ponía enferma. Además, es de esas novelas que sabes cómo va a terminar, pero es que no te genera ni un mínimo interés por cómo lo va a hacer (que se supone que ese es el gran atractivo de las novelas románticas).

En cuando al de Mujeres que corren con los lobos... Fue una recomendación de una amiga y de una persona que te crees que es tu amiga hasta que te borra del Facebook sin venir a cuento y ya te quedas con la mosca detrás de la oreja por saber qué coño ha pasado para que eso pase sin que tú te enteres. Y NUNCA MAIS vuelvo a aceptar una recomendación de pseudo-hippies
Una y no más, santo Tomás.
Es un libro de esos que van de profundos por la vida y que se repite más que las lentejas con chorizo. En serio que quería que me gustase. En serio que me parecía interesante, pero es que, joder, daba vueltas a la misma idea durante páginas y páginas. Y yo me quería pegar un puto tiro.

Me encantaba el hecho de que contaba cuentos y los analizaba. Algunos eran los típicos clásicos (Grimm, Perault, etc.), otros pertenecían a otras tradiciones como la africana o la americana. El problema era cuando cuando te desgranaba la misma idea grano a grano, eternizando mi sufrimiento. Pensé en leerme sólo los cuentos y a volar, pero es que ni ganas de hacer eso tenía cuando miraba el libro. También barajé la opción de llevármelo como lectura cuando voy al pueblo para distraerme mientras mi abuela ve a María Teresa Campos, pero ni por esas.
Me quedaba dormida leyendo del ABURRIMIENTO que me contagiaba el libro.
Prefería ver a la Campos que leer.
Aunque lo peor no es que no me gustara, sino que me COMPRÉ el libro (técnicamente me lo regaló mi hermana, yo se lo pedí porque soy retrasada). Y ahora quiero quemarlo muy fuerte.