viernes, 12 de marzo de 2021

"Sombra y hueso", de Leigh Bardugo

4'5 - Recomendable

Me terminé el libro hace tres días pero vivo obsesionadísima con él. No sé qué me pasa. No me lo puedo quitar de la cabeza. Sombra y hueso es tan bueno como me habían dicho. ¿Por qué no me lo leí antes? ¡Podría llevar ya cinco años fanguirleando, joder!

¡Porque soy gilipollas, por eso!
En mi defensa diré que en aquel momento en el que la blogosfera literaria estaba descubriendo Sombra y hueso, también estaba dándosele bombo a Divergente y a Trono de Cristal, así que yo tenía el límite de leer gilipolleces sin sentido muy bajo y decidí que de este libro mejor íbamos a pasar, por nuestra salud mental y nuestro bolsillo. 

¡ERROR!

¡Sombra y hueso me ha flipado! Bueno, a lo mejor me estoy dejando llevar, pero es que estoy empezando a salir ahora de la nube de obsesión en la que he vivido estos días. ¡Qué hasta tengo un fondo de pantalla de la serie puesto en el móvil cual adolescente en el 2005 poniendo su fondo de escritorio para hablar por el Messenger! (Tampoco es que el fondo de pantalla que tenía antes de éste fuese más maduro... Eran las Spice Girls presentando su segundo álbum, Spiceworld, en Granada en 1997).

Obviamente, culpo de esta lectura a Netflix. Si no fuesen a sacar la primera temporada de la serie el 23 de abril, probablemente nunca le hubiese dado una oportunidad a este libro. En cuanto vi que salía Ben Barnes, corrí a mi Kindle y a mi web pirata de confianza a ver si lo tenía. 

Por si alguien con menos de 25 años me está leyendo, Ben Barnes fue el Príncipe Caspian en Las Crónicas de Narnia:
Aprovecho este .gif para recordar a William Moseley, dueño y señor de mi corazón adolescente.
También salió en otras películas de fantasía como Stardust, Dorian Gray, El séptimo hijo, y en series como Westworld (donde ya comprobamos que el negro le sienta de muerte):
Me refería más bien al negro del traje de vaquero, pero este .gif también me valía.
Así que cuando me enteré que iba a salir en esta serie, y encima vistiendo de negro, pues corriendo pa'llá que fui.
¡PAM! ¡EMBARAZADA!
En fin, que yo por el príncipe Caspian me veo lo que haga falta, y así llegué a esta montaña rusa de emociones (pun intended) que es Sombra y hueso.

Bueno, el libro, que me voy por las ramas. De primeras no daba un duro por él, honestamente. En la portada aparece una recomendación de Verónica Roth (autora de Divergente) y yo de esa señora no quiero ni las gracias. Pero tengo que reconocer que ella escribirá como la mierda, pero recomendar sí lo hace mejor. Me he enganchado a este libro como hacía tiempo que no me pasaba (concretamente desde mayo del 2018, cuando me leí Cazados).

El sistema mágico del mundo de Leigh Bardugo no me ha impresionado mucho. Durante todo el libro usa conceptos y explicaciones bastantes vagas. Lo único que recalcan es su jerarquía y los colores que usan para diferenciar a los grisha. No sé si más adelante, en el resto de entregas, se va a molestar en explicarlo o si lo va a dejar así. Lo que sí me ha gustado es el detalle de que la historia esté ambientada en una especie de Rusia imaginaria (con mucha imaginación, porque probablemente si le preguntamos a alguien de Rusia como cuánto se parece a su país a principios del siglo XX, nos dirán que lo mismo que un huevo a una castaña).

La protagonista, Alina noséqov, me ha caído bien. No se me ha hecho pesada ni demasiado adolescente (a ver lo que le dura el resto de la trilogía, pero rompamos una lanza a su favor de momento). El que me ha caído MAL es Mal (cualquiera diría que la autora le puso el nombre a propósito). Es que no puedo con el chaval. Me parece gilipollas. Ya está. Ya lo he dicho. No lo aguanto. No me gusta como trata a Alina (cofcofmachistacofcof). Ojalá muriese en el próximo libro, pero seguro que sobrevive a todo (para mi desesperación)
¡Qué te mueras ya, Mal!
En cuanto al resto de personajes, para mí El Oscuro se roba el espectáculo, claramente. Es aparecer en escena y el libro se vuelve mil veces más interesante.
Yo por ti me subo la manga, el sujetador y lo que haga falta, Ben Barnes.
La novela empieza bien, conforme avanza va in crescendo y a mitad del libro se te va la cabeza con tanto plot twist.
Necesito que estos dos se casen.
SPOILER ¿Cuándo coge y a mitad de libro le planta un beso a Alina? ¡¿HOLA?! ¿Cuándo el día de la fiesta de invierno esa vuelve a comerle el hocico e insinúa subir a su habitación? ¡¡¡¿HOLAAAAA?!!! ¡Bueno, bueno! Yo flipaba en colores. ¿Y cuándo diez páginas más adelante se descubre que en realidad El Oscuro es el villano (con ese nombre, tampoco sé de qué coño nos sorprendemos) y yo estaba montádoles la boda en mi mente cinco segundos antes? WHAT?!!!! FIN SPOILERS 
Tu futura esposa, BEN BARNES. <3
Estoy deseando leerme la segunda parte y casarme con El Oscuro. Aunque tengo el feeling de que me va a decepcionar. Segundas partes nunca fueron buenas, y en las trilogías la segunda parte siempre suele usarse de puente para el gran final, aportando cero a la trama y sólo mareando la marrana... Espero que no sea así. Espero que Leigh Bardugo y Alina me den una alegría.

2 comentarios:

  1. Yo lo lei en 2014 y estoy acostumbrada a que todos odien a Mal pero HAHAHAHA YO NO, YO LO AMO XD
    Asi que Malina stans, somos pocas pero fieles hehe

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    Respuestas
    1. Necesito que me expliques porqué amas al personaje, Nina. ¿Mejora en las siguientes entregas? ¿Se vuelve consciente de su machismo (es que se pone como un pitbull de loco cada vez que un hombre osa tocar a Alina, joe)? Ilumíname, por favor, jajajaja.

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